¿Por qué invertir en un entrenador personal es una buena inversión?
Mario Campoamor, esposo de la señora Condesa y responsable creativo de la línea masculina de la marca, es uno de los entrenadores personales más solicitados de Madrid. Pero antes de nada, vamos a saber cómo llegó hasta aquí.
Uno de los responsables de que Mario haya entregado su vida al deporte es su abuelo, Ángel Campoamor, boxeador de peso ligero que debutó en Madrid en los años 30, tuvo que dejar aparcada su carrera profesional por la llegada de la Guerra Civil. Una vez finalizada la contienda, Ángel tuvo que centrarse en el trabajo para sacar a su familia adelante, pero nunca abandonó el espíritu deportista y luchador que inculcó a sus hijos y más adelante a sus nietos. Siguiendo su estela, y gracias al apoyo incondicional de su hijo, el Señor Gregorio, padre del protagonista de este post, Mario empezó a entrenar desde muy pequeño en distintas modalidades: desde fútbol, hasta ciclismo y por supuesto, boxeo. Según palabras de Mario: "mi abuelo siempre me habló del boxeo como un deporte noble, practicado entre caballeros para medir limpiamente las fuerzas de hombre a hombre. Pero también como un medio de superación y evasión en unos tiempos que se antojaron complicados de vivir."
Licenciado en INEF por la Universidad Europea de Madrid, al acabar los estudios y tras haber pasado por distintos gimnasios privados de Madrid, Mario continuó con programas especializados en técnicas de gimnasia sueca, según las cuales se pueden entrenar todas las partes del cuerpo con un mínimo de aparatos y equipos, vuelta a lo básico, el retorno a lo auténtico, corriente que impera a día de hoy y que supo ver antes de que llegara la moda, por los que podemos asegurar que es todo un visionario.
Así, con la filosofía de su abuelo y padre presentes, Mario lleva ejerciendo desde hace más de una década de entrenador personal en Madrid. En pleno Barrio de Salamanca se encuentra Campoamor Sport Club, el espacio donde ha atendido y atiende a un sinfín de clientes con objetivos muy distintos pero siempre con algo en común: la necesidad de mejorar. Para ello asegura que no se necesitan máquinas complejas sino un buen entrenador que te motive, te acompañe en todo momento y persiga lo mismo que tú, tu felicidad personal. Algo que hagas para tí y sólo par tí, los beneficios con infinitos.
Mario, ¿cómo se debe elegir a un buen entrenador personal?
Lo primero que se debería preguntar es si es licenciado en Educación Física. Los licenciados tienen una formación muy completa para el entrenamiento personal y, sobre todo, a nivel fisiológico, anatómico, médico, muscular… Ahora hay mucho intrusismo de personas que han entrenado a un par de amigos y han hecho cuatro pesas. Al final solo pueden entrenar a personas sanas entre 20 y 40 años, sin problemas de columna, de rodilla….
¿Y por qué invertir en un entrenador personal?
Invertir en un entrenador personal es una buena opción por un motivo muy simple: porque vas a conseguir los objetivos por los que te pones a hacer deporte. Cada uno tiene un objetivo distinto, como ponerse fuerte, bajar peso, reducir abdomen… El primero debería ser la salud, pero en el mundo tan vanidoso en el que vivimos, el segundo objetivo es el estar guapo y gustar. Un entrenador personal te va a guiar para cambiar tus hábitos `menos buenos` por otros saludables y marcarte unas pautas de entrenamiento específicas para tu anatomía. Así se ahorra tiempo y, al final, aunque parezca mentira, dinero. Mucha gente me viene rebotada del gimnasio porque no ha conseguido nada o no se ha enganchado al deporte, y el entrenador personal hace que tu consigas hacer ejercicio por tu cuenta, que puedas irte de vacaciones y echarte a correr o a nadar en la piscina. Eso es un avance muy importante.
¿Y cómo definimos objetivos?
Los objetivos, como todo en la vida, tienen que ser a largo plazo. Todo lo que sea exprés y rápido en el tema del deporte no vale. Se necesita tiempo para que los beneficios que se van consiguiendo perduren en el tiempo, se queden en el organismo y lo puedas utilizar en cualquier momento de tu vida. De nada me sirve machacar a un tío durante dos meses para que corra rápido si luego se va a lesionar, va a hartarse de correr para el resto de sus días… Prefiero que lo haga despacio, que vea el progreso, que cada vez aguanta más, que baja de peso, que baja el tiempo… En el deporte la rapidez no es buena consejera. Cuando una persona viene, normalmente trato de llevarlo a la realidad. La gente de a pie no es deportista de élite, no puede llegar a ciertas cosas, y tampoco debemos forzar mucho. Hay que llegar al punto en que el cliente y el entrenador están a gusto con la meta que desean conseguir.
Hablemos de las dietas…
Dietas, zumos detox…exceso de información. Hay un boom desde hace casi diez años sobre el ejercicio, las dietas milagro, los productos ecológicos, la vida saludable… Para la gente que llevamos haciendo deporte toda la vida esta es una moda más. Las modas son pasajeras y si no están basadas en ciencia y demostradas no valen para nada. Si quieres ponerte a dieta, lo primero que hay que hacer es ir a un médico endocrino, ni siquiera a un dietista. Tiene que ser un médico. En las dietas buenas no pasas hambre, comes de todo tipo de alimentos, y no llevan ningún batido milagroso ni ninguna proteína del futuro. Es comer lo que gastas. Si comes más de lo que gastas engordas; si comes menos de lo que gastas, adelgazas. En cuanto a los zumos, pues igual, se han puesto muy de moda pero no se cuenta la parte B. Todos los que consumimos, aunque sean de fruta fresca y natural, tienen azúcar. La fruta tiene fructosa, que no es azúcar malo (como la de un bollo), pero no deja de ser azúcar. Si te pasas con los zumos (2 o 3 zumos al día), lo único que le estás dando al cuerpo es glucosa. Si la glucosa no la quemas, se convierte en grasa, lo que es otro grave error. Hay gente que luego sufre un efecto rebote brutal. Los zumos son un complemento. La fruta masticada es mucho mejor. Lo que vale es lo que puedes demostrar. Si quieres saber de fitness, tienes que acudir a una persona especializada. No valen los consejos de las revistas de moda, ni los entrenadores que venden sistemas inventados. La forma eficaz de perder peso es esta, con guía profesional, que no te cuenten batallas.
Bien, y ahora ¿cómo elijo el gimnasio ideal?
Si ya tienes elegido el entrenador, al gimnasio le debes exigir que esté cualificado y que tenga a tu disposición toda una serie de aparatos. Pero sobre todo formación para que pueda exprimirte al 100%. Lo bueno de un entrenador es que te va a sacar todo lo que tengas, que cada día es algo distinto. Hay que exigir que con las herramientas que te dan te saque tu máximo rendimiento.
Entonces, ¿cómo arrancamos con la Operación Retorno verano 2018?
Se debe empezar muy suave, con ejercicios básicos, carrera continua para trabajar el corazón, las articulaciones y los músculos y que se vayan desoxidando. Unos 20-25 minutos está bien dependiendo de la forma física de cada uno. Trabajar también abdominal y algo del tren superior (hombros, pecho, espalda, bíceps). Con esto hacemos una pequeña puesta a punto. Hay que trabajar todos los músculos por igual para que el resultado sea equilibrado, porque si no se trabaja de esta forma, se pueden tener descompensaciones musculares que traen lesiones. Si trabajas piernas, pero no trabajas el tren superior, vas a tener problemas de columna; si solo trabajas el tren superior, vas a tener problemas de rodilla y de cadera. Hay que empezar muy despacio. Yo recomendaría 3-4 días por semana: unos 20 minutos de carrera continua o natación, unos 10 minutos de abdominales y otros 10-15 de tren superior.
Para finalizar, ¿qué consejos darías a la hora de repartir el ejercicio semanal?
A mí el entrenamiento semanal me gusta hacerlo casi todo todos los días. Me gusta hacer los ejercicios mezclados. Hay que ir cambiando y variando para ver qué le sienta bien a tu cuerpo. Cada uno es un mundo, pero recomendaría 40-45% de aeróbico (que es la base de cualquier deporte, el corazón tiene que estar en forma), un 20-25% de musculación y otro 20-25% de estiramiento, resistencia, flexibilidad, ejercicios propioceptivos.
Pues ahora ya conoces al mejor entrenador de la Capital del Reino. Si quieres dar el paso que tanto tiempo llevas buscando, no lo dudes, llámalo, Mario es el entrenador personal que estás buscando, no te arrepentirás.Y para hacerte con las chaquetas que has visto en este post tan fácil como hacer click aquí.